Me quedé encerrada en el baño de un restaurant. Sufrí un segundo de pánico y después me dediqué a pensar en cómo salir de ahí. No había picaporte, se habría caído del lado de afuera. No había más de 5 cm. entre el piso y el fondo de la puerta así que ni siquiera contra mi voluntad podía hacer cuerpo a tierra y reptar hacia la libertad. Gritar me pareció demasiado exagerado, fuera de contexto. ¿Qué iba a decir: auxilio, socorro, hola?. Las opciones no me convencieron y me quedé callada respirando fuerte. Hice una fuerza bestial y nada se movió así que trepé al inodoro, pasé una pierna por el espacio entre el techo y la parte de arriba de la puerta (apenas 25/ 30 cm.), hice presión entre las paredes y mis brazos y me tiré. Caí parada. Hubiera necesitado público para que aplauda mi hazaña una vez que me vi del otro lado, igual le sonreí a la nada triunfante.
20 comentarios:
wow!!
ademas! sos acróbata?!
jejeje
(yo hubiera dicho "hooooolaaaaaa!!" como decia Julián Weich)
que genia! me sacaste una fuerte y extensa carcajada!!!!!!
lo mejor de todo es que creo que yo hubiera pasado por la misma serie de pasos que vos, los mismos pensamientos!!!
felicitaciones! prueba superada! nadie podría haberte visto, de ser así te hubieras roto algún hueso o torcido algo. tu hazaña fue como cuando le decías de chiquita a un grande que te mire hacer una prueba: cuando miraban no te salía, dejaban de mirar y todo salía a la perfección! mejor que nunca!!!! mirá, mirá de nuevo!
Es tal cual, violette!
Escenas de la vida posmoderna, algo interesante te esperaba en el restaurant, una buena cena o un buen acompañante, espero que el salto y el panico hallan valido la pena!
Saludos!
Admirable tu capacidad de reacción en una situación extrema, y sobre todo tu valentía.
Aysss! A mi me ha pasado alguna vez también...esta cosicas surrealistas...
Me gusta lo de sonreir a la nada triunfante, genial!
Qué disfrutes del finde ^_^
...por eso no estabas cuando te llamé. atrapada sin salida.
Me sentí muy identificada con eso de sonreir a la nada triunfante...
respirando fuerte, preparándose para el gran salto...
Auxilio. Eso solo se puede gritar en las peliculas. Si lo tenes que gritar de verdad no te sale, se siente muy raro y lo decis bien bajito para que nadie te escuche.
jajaja,me rei mucho,no solo con esta anécdota sino con el resto de los relatos.me identifiqué con el del volquete,tampoco yo puedo pasar sin relojear y cuantas veces encontré "tesoros"!
wow que experiencia! lastima que no llevaste el celular al baño jajaaj
una genia. y eso de mirar a la cámara, a la nada, pasa. Seguido.
muy batichica lo suyo
ahora con el planito mucho mejor, ingenioso. Yo creo que hubiera pateado la puerta.
si, estuve floja. Tantos años de artes marciales y no le pegué ni una patada.
no al encierro carajo!
Mi abuela me llevaba al cementerio de la Chacarita. La muy border iba siempre media hora antes de que cerrara. No te puedo explicar lo que sentía cuando escuchaba los golpecitos con que los guardias anunciaban el cierre. Todas y cada una de las veces pensé que me iba a quedar a pasar la noche con mi abuela y los muertos, no sé cuál de los dos más aterrador.
menina menina, deberías haber dado unas patadas a la puerta, y deberías haber llevado el celular, ahora, ya pensaste a quien llamarías, y que le ibas a decir,
De cualquier modo, todos por aqui te aplaudimos,
sentite enteramente aplaudida, como las gimnastas cuando dan el salto perfecto, y caen con los brazos en un angulo exacto.
Untalgregorio
Que lindo, je.
Supermercadita!
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